HEPA, que viene de High Efficiency Particulate Air, es una designación para los filtros que son capaces de atrapar el 99.95% de las partículas pm 2.5. Esta certificación se estableció en 1983, pero los filtros existen desde mucho antes y hasta fueron usados en la segunda guerra mundial para atrapar particular radioactivas que fueron expulsadas por las bombas atómicas en Japón.
Los filtros HEPA consisten en fibras de vidrio interlazadas que crean una malla que atrapan a las partículas para así limpiar el aire.